Las consecuencias de las nuevas tecnologías no se saben con certeza, pero en la actualidad las ventas de Smartphones y la innovación en el sector se ralentiza. Además los automóviles ingresan en el marco como uno de los próximos catalizadores del cambio económico y social en los próximos años. La forma en la que nos movemos por las ciudades se verá afectada a partir de la tecnología disruptiva en tres aspectos fundamentales: la Movilidad como Servicio (MAAS), el incremento en los vehículos eléctricos (VE) y la automatización.
Cómo afectarán las nuevas tecnologías la forma en que nos movemos por las ciudades
Y no solo es si estos acontecimientos realmente van a suceder, si no en qué momento comenzarán a tener un impacto generalizado en la sociedad. Solo basta con recordar que a pesar de que el primer coche a motor patentado de Benz, fue construido en 1885, pero la primera carretera en los Estados Unidos no se construyó sino hasta 1925, un momento en el que el 50% de los adultos estadounidense ya contaban con un coche.
Si bien es cierto que estas olas tecnológicas y empresariales influirán en la sociedad, realmente no determinaran el futuro. Lo cierto es que en muchos centros urbanos del mundo ya se esta experimentando la movilidad como servicio, particularmente a partir del rápido crecimiento de Uber desde el 2014.
El uso de los coches privados y la propiedad en las ciudades esta a punto de desaparecer a medida que los servicios de movilidad experimentan un crecimiento tanto en alcance como en la disminución de precios. Y las autoridades en las ciudades igualmente están tomando un rol importante sobre todo porque están ofreciendo inventivos a los vehículos.
Eventualmente las áreas de entrega y recogida reemplazarán los lugares de aparcamiento en los destinos más populares. Incluso aquellas personas que no pueden solventar estos servicios, comenzarán a pensar en los coches como un propósito general y en consecuencia seleccionarán diferentes tipos de vehículos y servicios para diferentes tipos de viajes.
Por otro lado, también es probable que las ventas a nivel mundial de los vehículos eléctricos se incrementen a medida que las empresas automotrices lancen modelos más asequibles al mercado. Las ciudades y los gobiernos además promulgarán leyes de emisiones mucho más estrictas.
Finalmente los vehículos autónomos aun no sabe con certeza cuando estará lista esta tecnología, incluso tampoco se sabe cómo se adaptará la normativa viaria y en qué medida se evitaran por completo los accidentes en carreteras.