Un aviso, una actualización o incluso a veces ni eso, y en unas horas solo una gran multitud de SEO comienza a trabajar para descriptar el algoritmo de Google. Pero ¿si pudiéramos saber los próximos pasos? Esto no debería ser tarea difícil, pues se supone que tendríamos que estar todos alineados para darle al usuario todo lo relevante en cuanto a su búsqueda.
Google Penguin
En el intento de adelantarnos al futuro, BruceClay.com ha propuesto la siguiente teoría: «La siguiente actualización de Google Penguin, que se preveía para finales de 2015 y que no esta muy claro si se ha dado, eliminará directamente los enlaces a través de las señales asociadas a backlinks inorgánicos». Esto quiere decir que los enlaces conseguidos de manera no natural no contarán ya como señal de ranking. Debemos saber que el algoritmo de Google es más inteligente cada día, por lo que es capaz de saber de dónde vienen los enlaces por sí solo, sin ninguna ayuda.
Cuando Google identifica una cantidad de enlaces inorgánicos elevada hacia nuestra web nos envía un aviso con la penalización. Cuando recibimos este aviso debemos identificar esos enlaces para poder enviar a Google un listado con el resumen de los intentos de eliminación por parte de los mismos. Si a partir de la próxima actualización de Google Penguin es capaz de identificar por sí misma todos estos enlaces, no será ya necesario el envío de este documento porque el algoritmo ya no les otorgará autoridad.
Lo primero que debes tener en cuenta es que no merece la pena el esfuerzo de trabajar en la consecución de los enlaces no orgánicos. Si ya antes nos arriesgábamos a una penalización por parte de Google si los descubría, ahora con la actualización de Google Penguin los identificará sobre la marcha y no obtendremos mejora en nuestros ranking.
Trabajar en estos enlaces no es productivo, ni siquiera de manera temporal. Tenemos que unificar esfuerzos para crear contenidos de alta calidad capaces de lograr enlaces de forma natural. Hablamos de contenido que otros sitios que quieran dar mención y compartir.
Todos sabemos que lo ideal es que nos pudiéramos olvidar de Google por completo, pero la realidad es que sea como sea nuestros objetivos deben ser siempre los mismos. Debemos ofrecer al usuario un resultado relevante a su búsqueda, por lo que todos nuestros actos deben estar supeditados a este criterio. Si no supiéramos que estamos haciendo algo mal, no tendríamos temor a las penalizaciones y no supiéramos que podemos hacer algo mucho mejor, no tendríamos temor a los cambios producidos en el algoritmo.