Qué papel juega la estrategia de contenidos en marketing digital

En el marketing digital actual, tener una estrategia es la única manera de asegurar cierta continuidad a las actividades de la empresa. El entorno digital es cambiante y muta cada cierto tiempo, pero hemos conseguido comprender algunas costumbres esenciales de este tipo de marketing. Hablamos de la manera en la que los usuarios se ven atraídos por uno u otros anuncios en Internet. También nos referimos a su preferencia por algunas palabras clave sobre otras y las técnicas que tenemos para medir estas afinidades.

Desarrollar una estrategia de contenidos que supervise cada aspecto de las campañas y posicionamientos de la empresa en Internet es fundamental. Este tipo de trabajo es muy demandado hoy en día por empresas de todo tipo de sectores. 

Muchas de ellas tienen en común que prefieren contratar freelances para empresas, es decir, autónomos especializados en estas materias. Esto les proporciona flexibilidad y ahorro en un momento en el que es esencial recortar en gastos superfluos. Este tipo de profesionales pueden contratarse para momentos puntuales de la creación o gestión de dicha estrategia. El tipo de relación laboral que surge es de un carácter más efímero, por lo que las empresas pueden cambiar con facilidad de estrategia de marketing si no consiguen los objetivos que buscan.

¿En qué consiste una estrategia de contenidos?

La estrategia es todo lo referido a planificar, gestionar, guionizar y distribuir un producto o servicio. En este caso hablamos de contenidos, es decir, material que subimos a Internet y llega a distintos públicos. Cada usuario reacciona ante estos contenidos de una manera, existiendo formas que son positivas para el negocio de la empresa y otras que son neutrales o, incluso, negativas.

Cada vez que un usuario entra en contacto con este tipo de publicaciones, se denomina impresión. A partir de esta unidad mínima de contacto, las acciones posibles aumentan y se bifurcan en diferentes opciones. Estas acciones pueden ir orientadas a unos patrones de compra determinados. Esto quiere decir que una empresa puede medir el comportamiento de sus usuarios en su web y sacar algunas conclusiones interesantes. Si descubre que la mayoría de compradores han visitado al menos dos publicaciones del blog, esta información puede ser muy útil. 

No podemos omitir apartados como la planificación, la definición del público objetivo, la creatividad de contenidos, la distribución y el análisis a posteriori.

El papel de la estrategia se divide en varios ámbitos

La estrategia debe ayudar a varios aspectos de la vida de la empresa. Por un lado, debe ayudar a expandir el mercado, ya sea consiguiendo nuevos clientes del mismo mercado o abriéndose a otros grupos poblacionales. También debe servir de complemento para lograr más ventas, ya sea de forma directa o indirecta. Cuando ampliamos la gama de productos, la estrategia de contenidos debe incorporar esta promoción desde el minuto uno.

Definiendo el público objetivo de la estrategia 

Es imprescindible plantearnos un público objetivo para entender la importancia y el alcance de la estrategia. Este público objetivo será el centro alrededor del cual construiremos una serie de supuestos cualitativos. Buscamos que los valores cuantitativos y cualitativos que le asignamos se asemejen a la realidad, rentabilizando así nuestra inversión. Con la palabra invertir nos referimos a los recursos necesarios para llevar el producto hasta esta persona. Cómo es posible calcular la inversión promocional realizada en cada consumidor, también se puede saber cuánto cuesta de media llevar a este tipo de usuario hasta el consumo.

Este público se define teniendo en cuenta aspectos psicológicos como sus preferencias de producto, preocupaciones, objetivos, ambiciones, ​ideas, etc. También se tienen en cuenta aspectos a nivel de usuario, como el tipo de medio que utiliza para conectarse a Internet o qué canales le impactan más.

Contenidos pensados para el público objetivo

La mejor manera de rentabilizar algún tipo de contenido es lanzarlo directamente a aquel público que es más probable que reaccione de manera favorable. Se trata de investigar y conocer bien la personalidad, los formatos y los dispositivos que caracterizan a estos grupos poblacionales. Los consumidores deben recibir contenido, ya sea a través de redes sociales, blogs o publicidad en buscadores que les anime a contactar o a consumir nuestra marca.

La clave de cualquier contenido a nivel individual es que sea memorable, simple, conciso y que identifique bien a la marca. En muchas páginas de Internet, la identificación de marca se produce después de haber hecho clic en el anuncio. Los usuarios apenas se pierden, ya que solo deben seguir el enlace que les ha interesado. Sin embargo, si no se hace la apuesta correcta, los niveles de recuerdo bajan. Esto quiere decir que la próxima vez que el usuario necesite consumir un producto o servicio, quizás no recuerde la marca detrás de esta publicación.

Crear contenidos y distribuirlos por diferentes canales

Es quizás la parte más interesante de la estrategia de contenidos, ya que empieza a tener en cuenta la creación de piezas. Cada publicación es diferente y debe adaptarse no solo al medio en el que se inserta, sino también al público al que va dirigido. Si hemos hecho los pasos de planificación estratégica adecuados, los resultados creativos estarán más orientados a cumplir objetivos. De lo contrario, es posible que caigamos en la excitación de crear contenido interesante pero poco comercial o con bajas tasas de recuerdo de la empresa.

Hoy en día se busca crear elementos sencillos y fáciles de comprender, por lo que es ideal reducir al máximo el texto. Las frases y párrafos redundantes son algo del pasado, ya que ahora es mejor incorporar infografías y diseños que ayuden a comunicar. Hay otros medios que se pueden utilizar: vídeos, podcast, contenido educativo, newsletter, etc. 

La idea es revolucionar este sector y transmitir información al usuario desde diferentes ángulos. No siempre buscamos el tono jocoso del tiempo libre, que es el que se suele utilizar cuando se miran redes sociales como Instagram. A veces los consumidores necesitan información redactada en estilo técnico, que tenga que ver con algún ámbito del sector de la empresa.

Sin duda, utilizar profesionales de este ámbito para las estrategias de contenidos es garantía de frescura e innovación. En un mundo en el que la presencia digital es la clave, conviene apostar sobre seguro en este aspecto.

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Este artículo ha sido escrito por un@ redactor@ que forma parte del equipo de Digital Marketing Trends.