El mercado de las criptomonedas es principalmente conocido por su volatilidad, contando con activos cuyo valor puede crecer hasta 50% en un par de semanas, o caer hasta 30% en cuestión de horas. Esto, aunque lo hace muy atractivo para quienes quieren retornos rápidos, también lo hace sumamente riesgoso.
El ejemplo más reciente de estos cambios veloces en el valor ocurrió hace tan solo unos días, cuando el mercado perdió alrededor del 10% de su cotización total en 1 día, generando pérdidas millonarias en todo el mundo y recordando por qué no es una inversión para cualquiera. Pero, ¿qué fue lo que pasó?
Temor al coronavirus
De acuerdo a fuentes dentro de la industria, el mercado de las criptomonedas se devaluó significativamente debido a las noticias sobre la aparición de una nueva variante del coronavirus: omicrón. La variante, mucho más infecciosa que el resto, estaría poniendo en peligro de cierre a gran parte de las economías del mundo.
Al igual que ocurre con las acciones empresariales, el mercado de las criptomonedas solo depende de la confianza de los inversionistas para incrementar o perder valor. Momentos de crisis generan miedo en el desempeño económico, por lo que muchos inversionistas prefieren canjear sus acciones (o criptomonedas, en este caso) por dinero “real” para evitar la pérdida del valor.
Esto a su vez genera una devaluación de los activos a medida que los vendedores comienzan a disminuir el precio para poder canjearlos con mayor velocidad. La confianza del mercado en los activos disminuye aún más, y los precios se desploman en consecuencia.
¿Inicia la recuperación?
A pesar de esto, debido a que el coronavirus se ha podido controlar de forma moderada en gran parte del mundo, muchos inversionistas han decidido mantener su posición, evitando realizar ventas de pánico que puedan significar pérdidas aún mayores. Así hemos visto como la mayoría de los activos estaría comenzando a recuperarse.
Aunque resulta imposible determinar si el valor seguirá elevándose en las próximas semanas, sí parece claro que las caídas no serán muy superiores al 10%. En el caso de que pueda ocurrir una caída aún mayor de cara a diciembre, enero o febrero, lo más probable es que no se mantenga por largos periodos de tiempo.
La inversión del 2022
No existen datos concretos para asegurar que las criptomonedas seguirán creciendo en el mediano y largo plazo, sin embargo, sí existe suficiente evidencia para prever que este mercado seguirá potenciándose en el 2022, con activos como el Bitcoin teniendo la posibilidad de superar los $100.000 por unidad.
En Europa, los inversionistas cuentan con un amplio catálogo de opciones de inversión, yendo desde las tradicionales plataformas de exchange y los servicios de corretaje, hasta bots automatizados para la inversión en productos derivados, como pueden serlo Profit Revolution software o bitcoincodedenmark.com.
Si bien los activos de gran valor, como el Bitcoin y el Ethereum, siguen siendo los más atractivos para los inversionistas, lo cierto es que muchos aseguran que el 2022 estará protagonizado por las criptomonedas alternativas (altcoins) y las memecoins, con algunos de los ejemplos más atractivos siendo Solana, Dogecoin, Shiba Inu, Cardano, Polkadot y Binance Coin.
El mercado de las monedas experimentó un tropezón importante y, aunque no se extendió por mucho tiempo, la realidad es que sigue siendo temprano para analizar el impacto de esta nueva variante del coronavirus en los mercados financieros. Las próximas semanas serán esenciales para determinar si estos activos inician el 2022 con grandes perspectivas de crecimiento, o si lo hacen a la baja.