Hoy en día si tu negocio no tiene presencia en el mundo online, no existes. A pesar de esta afirmación, no todos los sectores son tan fácilmente adaptables a este medio. Te contamos cómo puede un negocio más tradicional abrirse al mundo online.
¿Negocios tradicionales online?
Como decíamos, hay tipos de negocio que son más naturalmente presentes de manera online. De hecho, un negocio de los llamados tradicionales cuenta con ciertas desventajas respecto a los que solo operan de manera online:
- Puede implicar alquiler de local.
- Muebles de oficina.
- Permisos para iniciar la actividad.
- Solicitud de préstamos al banco.
Todo este esfuerzo inicial de tiempo y de presupuesto no es garantía de que vayamos a tener éxito.
Pero si de lo que hablamos es de digitalizar negocios o industrias tradicionales, ello implica innumerables ventajas, por ser una apertura de tu negocio. Si se adapta de manera adecuada al nuevo medio, nos reportará un mayor beneficio e incremento de nuestras cifras anuales.
La digitalización como tal dependerá del tipo de industria e incluso del lugar del mundo donde se parta. Empresas con mayores dificultades para digitalizar pueden ser las que tiene que ver con servicios de abogacía, industrias farmacéuticas, ventas retail o incluso una pastelería especializada en postres. Lo importante será saber:
¿Qué queremos hacer?
¿Qué hay en el mercado?
¿Los clientes están demandando estos servicios o necesitamos crear la necesidad?
Las claves de un negocio online
De entre las ventajas de un negocio online encontramos el de que se necesita mucha menos inversión. Si, además, nuestro negocio ya existe de manera offline, tenemos mucho ganado. Ya conoces el sector en el que te mueves, a los proveedores, al cliente físico… También cuentas con una red de infraestructuras en el caso de que tu empresa implique cadena logística.
Es cierto también, que en tipos de empresa más tradicionales, los propios empleados, a menudo, sienten miedo ante los procesos de digitalización. Los empleados pueden ver como una amenaza que el negocio se abra de manera online. ¿Y por qué? No quieren ser desplazados. La apertura online, en este sentido, puede ser un buen momento de renovación y de motivación en la plantilla.
Un caso de éxito: Welegal
Dentro de los negocios tradicionales abiertos al mundo online, podemos hablar aquí de un caso de éxito para ejemplificar algunas aspectos. Se trata de www.welegal.es, abogados especialistas en reclamaciones de indemnizaciones. Sin duda, la agilidad que ofrecen y la seguridad de cobrar por tu reclamación, les han procurado la confiabilidad necesaria para triunfar.
Sus clientes ahorran tiempo y también dinero. Recordemos que una empresa online abarata costes de muchas maneras, entre ellas, la de no tener que disponer de un local donde sus clientes acudan.
Welegal hace más ágil el trámite ya que puedes contactar a través de teléfono, Whatsapp, correo electrónico, en línea o a través del formulario.
Beneficios de la digitalización
La primera ventaja en la que podemos pensar es la de contactar con clientes sin que la distancia física sea un impedimento. De esta manera, amplias tu cuota de mercado sí o sí.
Además, en el sector comercial, se tiende al concepto de venta omnicanal. Vendiendo tanto servicios como productos, hay una tendencia a ofrecer el acceso a nuestros valores desde diferentes ángulos. Esta estrategia diversifica clientes y nos hace ganar volumen de ventas. El retorno entonces será mayor.
Un negocio online está abierto siempre. Ten en cuenta los plazos de respuesta a las peticiones y poder hacerte cargo de ello. El hecho de no estar delante de tu cliente no implica que éste no espera toda tu atención y cuidado.
Tener presencia digital nos hace más confiables. El hecho de contar con una tienda online, tener página web o disponer de perfiles en redes sociales nos hace más reales.
Las promociones pueden ser más dinámicas y llegar a mayor número de usuarios. Sin duda una ventaja.
En la digitalización de este tipo de negocio más tradicionales hay, en realidad, un nicho de mercado. Aprovéchalo tanto si se trata de abrir una línea de negocio online integrada a tu empresa offline, como si quieres emprender un nuevo reto. En lo online hay menos trabas que salvar, sobre todo al inicio.