¿Qué es el CTA?
Un call to action es, en su traducción exacta, una llamada a la acción. Le dices al lector de tu web o landing page qué es lo que quieres que haga y ¡eh! Lo hacen.
Normalmente es un texto introducido en un botón que dice cosas del estilo: regístrate, apúntate ahora, descúbrelo aquí, haz clic (aunque este debería estar prohibido por manido), y todas las órdenes que te puedas imaginar dentro de un texto en una web o un emailing. Veamos algunos ejemplos.
Ejemplos
Lo primero que tienes que pensar es: ¿Qué quieres que haga tu público? ¿Qué beneficio vas a darle? ¿Cuál es su punto de dolor? Si alguien llega a tu web o abre tu email, ya partes con que hay un interés previo. En algún punto de su existencia un clic le ha llevado hasta ti.
Pero vas a perderle si no le indicas de forma clara qué quieres que haga a continuación y sobre todo, qué beneficio va a extraer.
Simplifica al máximo. Comunica un mensaje que lleve a una acción determinada. Y sobre todo, explica de forma muy clara por qué deberían llevar a cabo la acción qué les pides. ¿Qué se van a llevar a cambio?
Copy
Buenos consejos de HubSpot:
- Empieza con verbos (Descubre, Prueba, Descarga…)
- Incluye números que denoten precisión
- Olvídate de los adverbios
- Pocos caracteres
- Adiós a los tecnicismos… ¡Utiliza un lenguaje claro!
Yo añadiría dos:
- ¡Sé original! Gran ejemplo de un emailing de Vilma Núñez, siempre cercana y con un tono con el que te identificas.
- Mete prisa: Cualquier elemento que cree emergencia o última oportunidad, jugará a tu favor.
Diseño
Tan importantes son los espacios (dejar respirar el botón), como diferenciarlo de forma clara con otros colores, tipografías… El diseño es esa disciplina de la que todo el mundo opina, pero por mi parte, prefiero dejárselo a los especialistas en el tema 🙂
Y después de que hagan clic… ¿qué?
Asegúrate de que la página de destino es coherente con el mensaje que das a través del CTA. Parece obvio, pero es sorprendente la de cosas extrañas que pueden llegar a encontrarse por ahí. Y por último:
Prueba, prueba, prueba… ¡y mide!
Puedes probar diferentes mensajes, colores… Colócalo en distintos sitios de la web, mide y descubre qué es lo que mejor resultados te da.
Fotografía por David Di.