Disfruta tus vacaciones a través de la práctica de unas sencillas estrategias
Los investigadores en sicología cada vez descubren mucho más acerca de cómo funciona el cerebro humano, de hecho, estamos obteniendo pistas de cómo procesar exactamente el factor del disfrute y por qué deberíamos hacerlo. A continuación, algunas estrategias para sacar el máximo provecho a nuestras vacaciones sin tener que terminar necesitando “unas vacaciones de nuestras vacaciones”.
- Planificación: La anticipación puede representar una gran parte de la felicidad humana. Un estudio de vacationersfound determinó que las personas no empiezan a ser felices cuando se van de vacaciones, esa felicidad comienza mucho antes, cuando se piensa sobre lo bien que estaremos pasando sentirás alegría anticipada de lo que esa experiencia traerá. Así que planifica tus vacaciones y empieza a disfrutar desde ahora lo que harás en ellas.
- Cantidad sobre “una vez en la vida”: Uno de esos viajes de “una vez en la vida” como por ejemplo, un mes en Tanzania sería grandioso, pero el aspecto de este tipo de vacaciones limita la contribución a la felicidad. Estudios al respecto encuentran que regresamos a niveles de felicidad de forma relativamente rápida mientras viajes o vacaciones más pequeñas realizadas de forma frecuente, ayudan más al bienestar general de la persona que aquellas infrecuentes o de “una vez en la vida”.
Hacer cosas que disfrutes y delegar las que no, estrategias claves para unas vacaciones inolvidables
- Hacer cosas nuevas: Las vacaciones son una gran oportunidad para planificar nuevas experiencias, por ejemplo, hacer kayak, montañismo, ir de camping, etc., lo importante es que sea algo nuevo. Mientras para los jóvenes casi todo es nuevo, los adultos tienen la tendencia a seguir rutinas, las cuales son precisas romper si queremos disfrutar unas vacaciones al máximo.
- Llena tus días con cosas que disfrutes: Expertos que han pedido a la gente reportar sus estados de ánimo durante el día, han encontrado que los momentos más felices han sido cuando se están relajando, socializando, ejercitando, comiendo o también cuando realizan “actividades íntimas”. Así que aparte de vivir las aventuras típicas de unas vacaciones, saca tiempo para leer relajadamente, contemplar tu alrededor e interactuar con otras personas, principalmente con aquellas que tengas un vínculo emocional o afectivo.
Fuente: nowresortsblog.com
- Delega las cosas que no son divertidas: Las tareas del hogar y el cuidado de los niños es algo inevitable, pero es recomendable crear una atmósfera también para los adultos en vacaciones. Una idea puede ser traer a los abuelos para que nos den la mano como canguros o simplemente encontrar un hotel barato con servicio de “babysitting” por lo menos por un par de noches. Si las vacaciones son en grupo y se alquila una casa o piso, se puede reunir dinero entre todos para contratar a alguien que se encargue de este tipo de actividades.